
La Asociación Gernika-Palestina ha repasado la alarmante situación del pueblo Palestino y reivindica el alto el fuego y la importancia de continuar con las presiones sociales.
Según los datos aportados por la organización, de cada 10 personas una ha perdido la vida en un ataque israelí y nueve están desplazadas. De cada 100 niños, cuatro han perdido a uno o ambos padres. Y de cada 10 hogares nueve están destrozados.
Ibón Meñika. como miembro y portavoz de la Asociación, ha reiterado en un primer lugar que sólo corresponde a las y los palestinos decidir sobre el futuro de su país, y aún más en las dramáticas circunstancias de un genocidio. Ante esta situación, la asociación Gernika-Palestina hace un llamamiento a la comunidad internacional para garantizar cuanto antes la ayuda humanitaria básica y profundizar en el aislamiento de Israel. Esto se debe a que según la organización, solo una combinación de resistencia local e internacional sostenida podrá abrir la puerta a una alternativa real. Además, la asociación sostiene que el diálogo y la negociación política son el camino para conseguir un acuerdo construido sobre los principios de igualdad, libertad y dignidad para Palestina. Asimismo, invitan al pueblo vasco a sumarse a las movilizaciones y caceroladas previstas en las calles de Bilbao para el 15 de octubre.
Nuevos retos en el frente
Asociaciones como la UAWC y la UPWC se enfrentan a importantes retos. Entre ellos destacan la movilidad restringida por bombardeos y controles, el alto riesgo de seguridad para los equipos y población con la que trabajan y las trabas financieras. Además, las organizaciones se enfrentan también a altos costes de transporte, que afectan principalmente a la movilidad y a la escasez y encarecimiento de artículos esenciales para refugios. Pero a pesar de que estas limitaciones, sumadas al contexto de inseguridad, condicionan en gran medida la cobertura de las actividades, no se han detenido las respuestas de emergencia.