El programa Bilbosport de Telebilbao vivió un encendido debate entre sus tertulianos y el presentador sobre la posibilidad de que el Athletic haga pasillo al FC Barcelona si el conjunto blaugrana se proclama campeón de LaLiga antes de su visita a San Mamés. Un gesto simbólico que ha dividido a la afición y también a los analistas. Las posturas, como era de esperar, fueron dispares.
Barrientos
Jesús Barrientos: “El pasillo se hace por respeto al fútbol y a la institución”. «El profesor» fue claro desde el inicio: “Me da lo mismo el Barça que el Villarreal o que el Betis. Si han quedado campeones, es porque lo han sido con justicia. Al final esto es fútbol y no me voy a pasar el verano dándole vueltas a un pasillo. Somos una afición señorial y el Athletic está por encima de todo. Si hay que hacer el pasillo, se hace y punto. Con elegancia, como señores. Luego cada uno a su casa y ya está” .
Para Barrientos, no se trata de rendirse al rival, sino de mantener una tradición que habla bien del club que la realiza.
Cabanillas
Ana Cabanillas: “Es el campeón, se le hace y cada uno a su casa. Tan tranquilos como señores”. La tertuliana coincidió con Barrientos en el tono conciliador, aunque sin mostrarse especialmente entusiasta: “Hay que quedar bien y hay que hacerlo».
Perillas
“Perillas”: “Yo no les hago pasillo. Estoy hasta las narices de sus trampas y palancas”
En el otro extremo del debate se situó el conductor del programa, Luis Mari Vivanco “Perillas”, que no dejó lugar a dudas sobre su posición: “Yo no les hago pasillo. Estoy deseando que no ganen la Liga para que no tengamos que hacerlo. Que lo hagan entre semana, si ganan al Villarreal, vale, pero si llegan a San Mamés jugándose el título, no quiero saber nada de homenajes”. “Estoy harto de sus trampas, trampitas, palancas y palanquetas. Siempre hay manga ancha para ellos. Montan el circo en Canaletas, destrozan mobiliario urbano… y encima quieren que les hagas el pasillo”.
En definitiva, el pasillo al Barcelona si llega como campeón a San Mamés divide tanto como une, incluso entre voces con una amplia vinculación al Athletic y al periodismo deportivo bilbaíno. ¿Elegancia institucional o hartazgo ante los poderosos? El debate está servido.