
El Athletic hizo sus deberes (menos mal, porque el resto de resultados no acompañaron, ya que el Villarreal derrotó al FC Barcelona) y derrotó por 0-1 al Valencia en un partido con muy poca historia que se decidió con un golazo de Álex Berenguer desde fuera del área en los últimos minutos de partido.
Hasta entonces, las ocasiones más claras del cuadro rojiblanco fueron un remate de tacón de Gorka Guruzeta y una falta directa desde la frontal del área de Oihan Sancet que despejó Mamardashvili a córner. La presencia del ‘Lince‘ fue la principal novedad de Ernesto Valverde en el once titular, pero volvió a encoger el corazón de los athleticzales cuando recibió una dura entrada de José Luis Gayá. Afortunadamente, pudo continuar con normalidad.
Hasta entonces, las mejores ocasiones habían sido de los locales: un remate seco de Luis Rioja que mandó a córner Unai Simón con una gran parada y un cabezazo de Diakhaby que salió por encima del larguero.

El Athletic resistió y supo golpear en el momento exacto
El paso por vestuarios no alteró el planteamiento del partido. De hecho, tampoco hubo mucho que llevarse a la boca. Hasta que Álex Berenguer rompió el letargo inventándose un latigazo desde unos 25 metros imparable para Mamardashvili. Sin lugar a dudas, uno de los golazos de la temporada.
El Valencia acusó el golpe y tampoco opuso resistencia. De hecho, estuvo más cerca el 0-2 en un remate muy flojo de Unai Gómez tras una gran jugada de Iñaki Williams, que volvió a tener minutos.