
La entrada en vigor del nuevo Reglamento de Extranjería este martes 20 de mayo ha provocado una situación crítica para decenas de trabajadores inmigrantes en Burgos. Según informa el Diario de Burgos, muchos de estos trabajadores, que llevaban años asentados en la ciudad y contaban con empleos estables, se han visto forzados a darse de baja de sus puestos de trabajo, renunciar a sus solicitudes de asilo y entrar en una situación administrativa irregular para poder iniciar un nuevo proceso de regularización.
Colombianos: los más afectados
Este cambio legal afecta especialmente a sectores como la hostelería, el reparto a domicilio, la logística, la construcción y el servicio doméstico, donde la mano de obra extranjera es fundamental. Las empresas locales, que ya enfrentan dificultades para renovar sus plantillas, pierden así a empleados formados y experimentados.
La mayoría de los afectados son de origen colombiano y estaban en proceso de solicitud de protección internacional. Con la nueva normativa, si no abandonan voluntariamente sus empleos y esperan seis meses en situación irregular, el proceso de regularización podría extenderse hasta dos años, durante los cuales no podrían trabajar legalmente.
Situación de vulnerabilidad
Organizaciones como Burgos Acoge están atendiendo a numerosos afectados, intentando agilizar los trámites de arraigo social o por formación antes de que el reglamento entre en vigor. Sin embargo, la falta de recursos en las Oficinas de Extranjería podría generar colapsos administrativos, agravando aún más la situación.
Aunque el nuevo reglamento introduce mejoras como la reducción del tiempo mínimo de permanencia en España de tres a dos años para solicitar el arraigo, también excluye a muchos solicitantes de asilo cuya petición esté pendiente o en recurso, dejándolos en una situación de vulnerabilidad.
Ante esta problemática, el Gobierno ha comenzado a respaldar una Iniciativa Legislativa Popular que busca la regularización extraordinaria de unos 400.000 inmigrantes en situación irregular, como respuesta a los efectos no deseados del nuevo reglamento.