Ernesto Valverde compareció en la sala de prensa de San Mamés tras la última jornada de LaLiga, en un día marcado por la clasificación para la Champions League y, sobre todo, por la emotiva despedida de Óscar de Marcos. El técnico rojiblanco, sereno y satisfecho, valoró una temporada “fantástica”, subrayó su orgullo por el grupo y reafirmó su compromiso con el club tras renovar su contrato.
“Hemos cumplido más de los objetivos marcados”, destacó Valverde, reconociendo la superioridad del FC Barcelona en el encuentro. El técnico lamentó no haber cerrado la temporada con victoria ni haber superado los 70 puntos, pero puso en valor el rendimiento global de su equipo: “Teníamos enfrente al campeón, y lo ha demostrado”.
Despedida de De Marcos
Uno de los momentos más señalados del partido fue la despedida de Óscar de Marcos, a quien Valverde dedicó palabras de enorme cariño y respeto:
“Estas cosas son emocionantes. Lo que representa De Marcos para el club y para quienes hemos compartido años con él es algo muy grande. Todo ha cuadrado para que su adiós fuera perfecto y se lo merece”.
Sobre el propio discurso de Óscar desde el centro del campo, Valverde añadió: “Estuvo preciso y emotivo. No era momento de hablar mucho, sino de transmitir lo que sentía. Lo hizo muy bien”.
Preguntado por su renovación, el técnico expresó su motivación: “Siento una gran responsabilidad con el club. Me impulsa lo que vivo cada día en Lezama, con los jugadores y el cuerpo técnico”, reconoció. “A veces no me da tiempo a disfrutar lo que conseguimos, pero intento celebrarlo, porque no es fácil lograr cosas como ganar la Copa o entrar en Champions”.
Competir
¿Qué debe mantener el Athletic para seguir creciendo? Valverde lo tiene claro: “La capacidad competitiva. Este puede haber sido el único partido de Liga que perdemos por más de un gol. Competimos siempre, ese es nuestro secreto”.
También se refirió a la emotiva comunión con la afición: “Hoy era un día para celebrar con nuestra gente. Entrar en Champions con el Athletic no pasa todos los días”.
Por último, habló sobre el relevo generacional en el vestuario tras la marcha de De Marcos, con Iñaki Williams como una de las figuras llamadas a liderar el nuevo ciclo: “Iñaki ya está aportando mucho, igual que Yuri, Unai Simón, Yeray… Son reconocibles para la gente y saben manejarse. Seguirán la estela de los históricos”.
Y sobre su último abrazo con De Marcos en el césped… fiel a su estilo, lo dejó entre bromas: “¿Qué le dije? No lo voy a decir. ¡Una broma! No me llaméis para nada.”, se despidió entre risas, como quien sabe que el trabajo está bien hecho.
