
Agentes de la Ertzaintza detuvieron el martes por la tarde en Bilbao a un joven de 20 años por un presunto delito de tráfico de hachís en una lonja del barrio Iralabarri. La actuación policial se inició tras recibir un aviso por un fuerte olor a cannabis que salía del local.
Al llegar al lugar, los y las agentes comprobaron que la puerta del bajo estaba entreabierta y que un joven manipulaba objetos sobre una mesa. Al inspeccionar el interior, hallaron 1,1 kilos de hachís en quince tabletas, una báscula de precisión, un cuchillo con restos de droga, seis teléfonos móviles envueltos en papel de aluminio y tres ordenadores portátiles.
Además de la droga y el material mencionado, se encontraron dos patinetes eléctricos, cuya procedencia se está investigando. El joven portaba también 400 euros en efectivo dentro de una riñonera.
Los agentes observaron restos de hachís en el suelo y el mobiliario, lo que indicaba que el local se utilizaba para el consumo y compraventa de estupefacientes. Ante estas evidencias, procedieron a la detención del joven, acusado de un delito contra la salud pública.
La Ertzaintza puso al detenido a disposición del Juzgado de Guardia de Bilbao tras finalizar las diligencias en la Ertzain-etxea.