La declaración de Bilbao como zona tensionada no llegará en julio, como había previsto el Gobierno vasco. Una alegación presentada por Elkarrekin Podemos al plan de acción trianual del Ayuntamiento ha obligado a retrasar los plazos y posponer la limitación de precios del alquiler hasta otoño. Así lo confirmó este miércoles el consejero de Vivienda y Agenda Urbana, Denis Itxaso, en el Parlamento vasco, durante una comparecencia a petición de EH Bildu.
Enmienda nunca vista
Elkarrekin Bilbao ha presentado una alegación «rigurosa», según definió Itxaso, al documento municipal que acompañaba la solicitud. El Departamento de Vivienda deberá analizarla, lo que impedirá remitir la documentación al Gobierno central en las próximas semanas. Sin ese paso, la publicación en el BOE se aplaza y con ella, la entrada en vigor de las medidas de contención.
Hasta ahora, ningún otro municipio vasco que ha sido declarado zona tensionada —Errenteria, Zumaia, Lasarte-Oria, Barakaldo, Irun y un distrito de Galdakao— había recibido enmiendas de este tipo, lo que ha facilitado su tramitación.
El Ayuntamiento de Bilbao envió en abril la documentación para activar los mecanismos previstos en la ley estatal de vivienda. Propuso declarar toda la ciudad como zona tensionada, incluidos barrios como Abando e Indautxu, al constatar que el gasto en vivienda supera el 30% de la renta familiar. A mediados de junio, Itxaso aseguró que no se había registrado ninguna alegación y confiaba en que los topes de alquiler pudieran aplicarse ya en julio. Sin embargo, el escenario ha cambiado.
Durante la sesión parlamentaria, el representante de EH Bildu, Xabier Astigarraga, criticó la «improvisación» con la que, a su juicio, el Departamento de Vivienda está gestionando estos procedimientos. Reclamó mayor rigor para que los ayuntamientos cuenten con seguridad jurídica.
