
El Ayuntamiento de Orduña hizo ayer, 15 de julio, un llamamiento a través de sus medios oficiales a la responsabilidad colectiva, ya que desde su apertura se han tenido que cerrar las instalaciones en varias ocasiones por la presencia de heces.
Desde el Consistorio del municipio subrayan lo siguiente: «Las piscinas son un espacio compartido. Evitar estos hechos está en manos de todos. ¡Cuidemos entre todos este espacio de ocio y bienestar!».
Para tareas de saneamiento y ante nuevos casos, las instalaciones deberán cerrarse entre 24 y 48 horas.