
La Guardia civil de Bizkaia ha requisado 61 kilos de comida de gato a un pasajero del ferry
La mercancía la llevaba en maletas , en paquetes con varias latas y de diferentes contenidos.
Dos kilos máximo
La normativa sólo permite llevar un máximo de dos kilos de comida y si el animal viaja con sus dueños.
En este caso el infractor ni siquiera tenía permisos sanitarios para el consumo y distribución de esta mercancía.
Los agentes han aplicado el reglamento que indica, que en caso de no ser reincidente el infractor, se puede optar por destruir la comida y no poner la sanción económica que le correspondía.