
Durante la jornada del domingo, se registraron múltiples incidencias en las piscinas de el Fango en Rekalde, que obligaron a intervenir a socorristas, personal de control, seguridad, Policía Municipal, Ertzaintza y servicios de emergencias. El incidente más grave se produjo alrededor de las 16:00, cuando un menor perdió el conocimiento fuera del agua; los socorristas le practicaron una RCP y lo trasladaron al hospital de Cruces.
Varias actuaciones en un día
Bilbao Kirolak, entidad gestora de las instalaciones, informó que el menor no se encontraba en el agua en el momento del desvanecimiento. Sin embargo testigos aseguran que el niño se desvaneció en el agua y sus amigos lo sacaron. Una vez que vieron que no respondía avisaron a los socorristas.
Además del niño, se atendió a varios menores y adultos por golpes de calor, mareos y ataques de ansiedad a familiares por el incidente ocurrido, lo que obligó a gestionar la situación con especial atención debido al número elevado de afectados.
En total, se realizaron tres traslados hospitalarios, y el personal de emergencia actuó con rapidez para estabilizar a los afectados. Las piscinas permanecieron cerradas durante varias horas y se reabrieron a las 19:30, una vez garantizada la seguridad de los usuarios.