
Las principales fiestas de verano de Getxo concluyeron ayer con la quema del Txo en el Puerto Viejo, dejando tras de sí un ambiente festivo, participación masiva y convivencia entre generaciones. La alcaldesa, Amaia Aguirre, destacó la diversidad y vitalidad de los eventos y agradeció el esfuerzo de comisiones, Policía Local, voluntariado y vecinos.
Este año, el Ayuntamiento reforzó la accesibilidad física y sensorial: pregones y entrega de premios en lengua de signos, alfombrillas para movilidad reducida y tarimas que facilitan la visión de los conciertos en el Puerto Viejo. También se mantuvo la línea de autobús nocturno, baños públicos adaptados y un servicio de limpieza intensivo.
Menos violencia
La seguridad marcó un hito: según datos provisionales de la Euskal Polizia, los delitos descendieron un 25% respecto a 2024, con un fuerte descenso en robos con violencia (37,5% menos). Se registraron 3 denuncias por delitos sexuales, todas con detención inmediata, y se decomisaron armas blancas evitando su uso en 30 peleas o conatos. La Policía Local destacó el comportamiento responsable de la mayoría de los asistentes.
El Punto Morado, servicio de atención a víctimas de agresiones machistas, consolidó su presencia en las fiestas, interactuando con unas 50 personas por noche y reforzando la sensibilización contra la violencia de género.