
Fernando Rodríguez, es uno de los 50 voluntarios que se han quedado a defender su pueblo, Valverde de la Sierra de los incendios. Este precioso lugar, en la comarca de Riaño, lleva tres o cuatro días pendiente de las llamas. Ayer fue el día más crítico: » Después de varios días, el fuego se acercó tanto que sentimos miedo por las casas. A las seis llegaron de la UME porque la situación era insostenible». Y es que desde que el humo empezó a verse ,en los montes cercanos, fueron los propios vecinos los que tuvieron que organizarse por turnos, sin dormir, para vigilar: » Vinieron de otros sitios, hasta de Vitoria, ¡una pasada!. Hicimos labores de desbrozar, quitar malezas, con lo que teníamos. Logramos dejar limpio un perímetro de unos 20 metros respecto a las casas». Esa distancia les daba una tranquilidad prudente aunque, en estos casos hay muchos factores que influyen, sobre todo el viento.
Desalojo
Ayer a las 12 de la noche, la UME pidió el desalojo de Valverde de la Sierra. Algunos, como hemos comentado antes, decidieron quedarse. Fernando Cuevas, otro bilbaíno que veranea allí optó por volver a Bilbao: » Los nietos son pequeños, por si acaso era mejor irse».
A las cuatro de la madrugada han llegado a casa: » Ha sido duro, no había efectivos. Muchos incendios y pocos medios». La información también les llegaba a través de redes, que han sido fundamentales para pedir ayuda.
Fernando, que sabe de esto, nos cuenta que los primeros helicópteros llegaron 48 horas después de que el fuego amenazase a Valverde de la Sierra.
El trabajo de colaboración entre los habitantes ha sido fundamental y hasta las ovejas han tenido su papel: » Usamos cientos de ovejas para aplastar la maleza, fueron unos voluntarios más».
Los dos Fernando creen que ahora todo está más controlado: » El viento viene a favor y ya hay servicios de emergencia».
Imagen de hoy
Esperan que todo quede en una situación complicada, con final feliz.
José Luis Sabas en Puente Almuhey
El que fuera Teniente Alcalde de Bilbao, José Luis Sabas vive los incendios de cerca, pero más tranquilo. El pueblo de su mujer es Puente Almuhey, también en León. Allí lo que les alerta de la magnitud de los incendios es el humo que ven a lo lejos: » Lo peor es que no nos llega información, a través de un diario local y las redes nos vamos enterando. Aquí se han cortado algunas carreteras. En Canalejas y Calaveras, que están cerca, ya están los hidroaviones que cogen agua de los acuíferos. Lo peor está en los Picos, hacia Cantabria, allí es monte cerrado».
De momento son las historias que nos llegan de bilbaínos que viven cerca del fuego, en sus pueblos de veraneo. Este Agosto, seguro que nunca lo olvidarán.
VUELTA DE LOS BOMBEROS DE EUSKADI
La Diputación ha anunciado que los efectivos, bomberos y personal de monte, que partieron el lunes desde Euskadi regresarán mañana a casa. Sólo permanecerá el helicóptero. Al parecer, son las instrucciones que les han dado de Castilla y León.