
En una operación conjunta llevada a cabo los días 25 y 26 de agosto, los Servicios Marítimos Provinciales de la Guardia Civil de Bizkaia y Cantabria localizaron e incautaron 51 nasas ilegales y una red de pesca de aproximadamente un kilómetro de longitud en la bahía de Santoña, entre Santoña y Laredo.
¿Qué son las nasas y por qué son un problema?
Las nasas son un tipo de trampa de pesca tradicional, normalmente en forma de jaula, que se utiliza para capturar especies como el pulpo, la nécora o el bogavante. Aunque su uso está permitido en ciertas condiciones y con licencia, el empleo de nasas de forma ilegal, sin control ni registro, supone una amenaza directa para la sostenibilidad de los recursos marinos. En este caso, las 51 nasas encontradas estaban colocadas de forma furtiva en aguas exteriores.
Estas trampas ilegales se colocan a menudo en zonas poco accesibles para las autoridades, lo que dificulta su localización y facilita la pesca indiscriminada. Además, cuando son abandonadas o se pierden en el mar, continúan atrapando especies marinas sin control, generando lo que se conoce como pesca fantasma.
Una red ilegal de un kilómetro
Junto con las nasas, los agentes hallaron una extensa red de pesca en aguas interiores de la bahía. Esta red, de un kilómetro de largo, representa una seria amenaza tanto para la biodiversidad como para la seguridad marítima. La red quedó bajo custodia de su titular y se ha abierto un expediente sancionador que puede derivar en multas de hasta 100.000 euros, dependiendo del daño ambiental causado.
Acción coordinada y seguimiento
Las nasas fueron entregadas a la Consejería de Pesca de Cantabria y la red quedó bajo vigilancia mientras se tramita la correspondiente denuncia. El caso ha sido comunicado a la Secretaría General de Pesca del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, y se mantiene activo el seguimiento de la zona para evitar nuevos episodios de pesca ilegal.