
Este sábado, el Bilbao Exhibition Centre (BEC) se ha convertido en el epicentro de la educación pública vasca. Miles de aspirantes se han dado cita para participar en la Oferta Pública de Empleo (OPE) más masiva de los últimos años en el ámbito docente, con 1.268 plazas convocadas para profesorado de Educación Secundaria Obligatoria (ESO) y Formación Profesional (FP).
Reducir la interinidad
La jornada ha arrancado entre nervios, ilusión y la esperanza de muchos de estabilizar su futuro profesional. Esta convocatoria, impulsada por el Departamento de Educación del Gobierno Vasco, busca reducir la interinidad al 4 %, un objetivo clave en el camino hacia una escuela pública más sólida y estable. Las cifras lo confirman: desde 2019 se han ofertado ya más de 9.600 plazas docentes en distintas especialidades y cuerpos educativos en Euskadi.
La consejera de Educación, Begoña Pedrosa, ha remarcado la importancia de consolidar al profesorado con empleo estable como parte de una estrategia a largo plazo para mejorar la calidad educativa. Según ha señalado en anteriores intervenciones, el compromiso del Gobierno Vasco es mantener convocatorias anuales para reforzar plantillas y asegurar la continuidad en los centros.
Garantizar el euskera y la diversidad
Además del volumen de plazas, lo que destaca en esta OPE es su papel estratégico: no solo es una oportunidad laboral para miles de profesionales, sino también una herramienta clave para rejuvenecer los equipos docentes, adaptarlos a los retos actuales del sistema educativo y garantizar que el euskera, la diversidad y la innovación pedagógica tengan un lugar central en las aulas.
Las pruebas se celebran íntegramente en el BEC de Barakaldo, un espacio ya habitual para este tipo de convocatorias masivas. A lo largo del día se espera la participación de miles de opositores llegados de toda Euskadi y otras comunidades, en una de las citas más esperadas por el sector educativo.