El Athletic puso fin a su racha de derrotas sumando un punto ante el colista de LALIGA EA SPORTS: un Girona que se mostró superior por momentos y al que la endeblez defensiva le privó de llevarse los tres puntos de San Mamés. Un latigazo providencial de Mikel Jauregizar palió la alarmante falta de pegada que volvieron a mostrar los leones.
Y eso que comenzaron dominando, llegando con cierta facilidad al área rival, pero el primer aviso serio lo dio el Girona. Vanat le ganó la espalda a Paredes y buscó un remate cruzado que salió rozando el palo. En la acción posterior, Ounahi superó a Unai Simón con un latigazo imparable que entró a la portería con la ayuda del larguero.
El tanto pareció hacer mella en el cuadro rojiblanco y Van de Beek pudo ampliar la ventaja poco después, cuando Unai Simón despejó con la cabeza un balón tras no entenderse con la defensa. El Girona se sentía muy cómodo y la grada de San Mamés se lo hizo saber a sus jugadores a base de una sonora pitada.
La primera ocasión clara del Athletic llegó superado el cuarto de hora por mediación de un cabezazo de Gorka Guruzeta. Poco a poco fueron entonándose. Nico Serrano lo probó a balón parado y, poco antes de cumplirse el minuto 25, Oihan Sancet lo intentó en dos ocasiones: con un remate tras centro lateral de Adama Boiro y en una volea desde la frontal del área tras un mal despeje de Gazzaniga.
Una posible lesión de Van de Beek no bajó el ritmo del partido. Laporte cabeceó con poco éxito un balón a la salida de un córner y evitó el 0-2 con un corte providencial a otro remate de Vanat. Unai Simón también hizo lo propio con otro remate de Ounahi poco antes del descanso.
El Athletic reaccionó tras el descanso
En busca de una reacción, Ernesto Valverde introdujo cuatro cambios al descanso. Areso, Yuri, Galarreta y Berenguer entraron en lugar de Gorosabel, Boiro, Vesga y Nico Serrano. La reacción no se hizo esperar, ya que Mikel Jauregizar puso el empate en el marcador con un potente disparo desde la media luna del área.
El dominio del balón volvió a ser bilbaíno tras el tanto, aunque el Girona avisó a Unai Simón con alguna ocasión clara, como un disparo de Vanat que golpeó en el lateral de la red después de que el delantero ucraniano regatease a Unai Simón. Poco después Guruzeta lo intentó con un remate mordido en el segundo palo y Paredes a la salida de un córner en la acción inmediatamente posterior. Gazzaniga también evitó el 2-1 con una gran parada a un remate seco de Álex Berenguer.
En los compases finales, Robert Navarro se pudo quedar solo ante Gazzaniga, aunque un zaguero evitó su remate y Berenguer lo intentó con otro centro que no encontró rematador. Pero en líneas generales, no hubo ninguna ocasión verdaderamente clara por parte de ninguno de los dos equipos.
