
El Tribunal Superior de Justicia del País Vasco ha confirmado el despido disciplinario de un trabajador que, estando de baja médica por una lesión en el hombro, fue grabado impartiendo clases de boxeo.
Según la sentencia, el hombre, que debía estar en reposo, dio al menos dos clases en las que realizó movimientos forzados, se expuso a impactos y llegó incluso a recibir un golpe en el hombro lesionado. Todo ello mientras seguía oficialmente de baja por esa misma dolencia.
Pruebas y vídeos
El trabajador recurrió el despido, alegando que no se había demostrado que sus actividades fueran incompatibles con su lesión. Sin embargo, el tribunal consideró suficiente la prueba en vídeo, fotografías y testimonios que mostraban su implicación física directa en las clases.
El fallo concluye que la empresa no tenía que presentar un informe médico pericial, ya que quedó acreditado que su conducta era objetivamente incompatible con su recuperación.
La sentencia aún no es firme y puede ser recurrida ante el Tribunal Supremo.