El déficit de lluvias en octubre ha dejado las reservas de los embalses que abastecen a Bizkaia en su punto más bajo del año. Según datos del Consorcio de Aguas Bilbao Bizkaia, los pantanos se encuentran al 55% de su capacidad, lo que equivale a 120,2 hectómetros cúbicos de agua. Hace un año, el nivel de llenado alcanzaba el 71,2%, con 35 hectómetros cúbicos más almacenados.
Lluvias muy por debajo de lo habitual
Euskalmet ha calificado el mes de octubre como “muy seco”, con precipitaciones inferiores a la mitad de lo esperable en todo Euskadi. Esta falta de lluvia ha afectado especialmente a los embalses vizcaínos, que dependen del sistema del Zadorra y de otros pantanos como Artiba, Oiola, Nocedal, Zollo, Undurraga y Ordunte.
El sistema del Zadorra, el principal proveedor de agua de Bizkaia, cuenta actualmente con 106,9 hectómetros cúbicos, lo que supone un 55,5% de llenado. Los embalses menores (Artiba, Oiola, Nocedal, Zollo y Undurraga) registran 2,7 hectómetros cúbicos, equivalentes al 69,6% de su capacidad, mientras que el pantano de Ordunte apenas alcanza el 48%, con 10,6 hectómetros cúbicos.
Por debajo del nivel de garantía
En conjunto, las reservas se sitúan 23,2 hectómetros cúbicos por debajo de la curva de garantía, es decir, del nivel óptimo que marca el volumen deseable de agua en cada momento del año. Esta situación incrementa el riesgo de entrar en escenarios de sequía si la tendencia seca se mantiene en los próximos meses.
Los expertos confían en que las precipitaciones del otoño avanzado y el invierno contribuyan a recuperar parte del nivel perdido, aunque advierten de que la persistencia de los episodios secos podría obligar a reforzar las medidas de gestión y ahorro de agua en Bizkaia.