Cualquiera que le haya echado un vistazo a la clasificación de la UEFA Europa League habrá podido ver que la lidera un equipo de nombre casi impronunciable y que seguro que muchos no saben ubicar. Junto al Qarabag, al que el Athletic derrotó en San Mamés, el FC Midtjylland danés se ha convertido, por méritos propios, en una de las revelaciones de las competiciones europeas en esta temporada.
Uno de los artífices de este éxito tiene nombre y raíces vascas: Mikel Johan Gogorza Krüger-Johson, aunque deportivamente se le conoce como Mikel Gogorza. Un jugador que, a sus 19 años, ya es internacional sub 21 con Dinamarca y ha llamado la atención de equipos como el Oporto de Andoni Zubizarreta, que este verano intentó su fichaje aunque finalmente se acabó llevando a otro vizcaíno: Borja Sainz.
Extremo izquierdo de altura (1,86 metros), se trata de un jugador con mucho descaro y que ya es uno de los mejores regateadores, al menos en cuanto a números, del continente. Esta temporada ya ha marcado tres goles, dos en la Superliga danesa que lidera su equipo, y otro en el importante triunfo por 3-1 que lograron el pasado jueves frente al Celtic de Glasgow.
Mikel Gogorza, hincha del Athletic por herencia familiar
Antes de que se lo pregunten, Gogorza no entra en la filosofía del Athletic. Su padre, Aritz Gogorza, nació en Baiona -por eso mismo Mikel tiene también nacionalidad francesa- pero se afincó en Rentería hasta que conoció a su mujer, danesa de nacimiento, y se desplazó hasta allí a vivir. Mikel Gogorza nació en la localidad noruega de Bergen en el año 2006, por lo que ni ha nacido ni se ha formado en Euskal Herria.
Tal y como el propio Mikel desvela en un artículo en la web de su club, es hincha del Athletic Club, igual que su padre. Irónicamente, fue su filosofía lo que terminó de convencer a su padre de dejar de seguir a la Real Sociedad para convertirse en hincha rojiblanco.
Desde su Dinamarca natal está pendiente de lo que hace el Athletic. Y, por el momento, todavía no ha cumplido su sueño de jugar en San Mamés. Sí lo hizo en Anoeta el año pasado, en eliminatorias de la UEFA Europa League.
