El Centro Formativo Otxarkoaga ha recibido el prestigioso Premio a la Solidaridad 2025, un galardón que pone en valor la labor educativa y social de la institución. El galardón ha querido destacar especialmente su compromiso con el alumnado más desfavorecido y su esfuerzo por facilitar su inserción laboral. La entrega tuvo lugar en la sala BBK de la Gran Vía de Bilbao, en un acto organizado por la Fundación Antonio Menchaca de la Bodega, que desde hace 25 años reconoce el trabajo continuado en solidaridad e inclusión social.
Formación adaptada a las necesidades de cada persona
El director del centro, Juanan Arrieta Del Río, subrayó la importancia de este reconocimiento: “Nuestra labor educativa se dirige a todo el alumnado, tanto en la enseñanza reglada como en la no reglada, pero ponemos un cuidado especial en quienes provienen de situaciones de fracaso escolar, dificultades sociales o necesidades educativas especiales. Nuestro objetivo es ofrecerles formación adaptada a sus características, ayudándoles a incorporarse al mundo laboral o a continuar sus estudios con éxito”.
Más de seis décadas trabajando por la inclusión
Otxarkoaga se distingue por su método de enseñanza personalizada, basado en principios éticos como el compromiso, el diálogo, la convivencia y el trabajo en equipo. Durante más de seis décadas, esta filosofía ha guiado la labor del centro, convirtiéndolo en un referente en educación inclusiva y en apoyo a quienes más lo necesitan.
En esta 25ª edición de los Premios a la Solidaridad, la Fundación Antonio Menchaca de la Bodega también reconoció el trabajo voluntario de Médicos del Mundo Euskadi, el esfuerzo de personas con discapacidad intelectual voluntarias en Gorabide y la trayectoria de Begoña Martínez Monasterio, destacando toda una vida dedicada a la solidaridad y al voluntariado.