Bilbao lleva dos días regalando momentos imposibles de ignorar. Hoy, un arcoíris visible desde el Puente del Arenal ha detenido a quienes paseaban por la zona. Con el Ayuntamiento al fondo, la escena se ha convertido rápidamente en una postal perfecta. Muchos no han podido resistirse a sacar el móvil para fotografiarlo o incluso hacerse un selfie con el arco iris de fondo.

Imagen: Alberto Labrador
Colores irreales
No es la primera vez esta semana que el cielo atrapa miradas. Ayer, el atardecer tiñó Bilbao de tonos rosas y morados, transformando por completo el aspecto de la ciudad. Durante unos minutos, parecía una fotografía retocada con filtros.
Las redes sociales se han llenado de imágenes y vídeos, y muchos vecinos reconocen haber guardado esos momentos en sus móviles como si fueran recuerdos únicos de un viaje, y no escenas cotidianas de su propia ciudad.