Bilbao prepara un amplio operativo de seguridad para el partido de Champions que enfrentará este miércoles a las 21 h al Athletic y al Paris Saint-Germain en San Mamés. El entorno del estadio contará con vallas perimetrales y un refuerzo policial específico para evitar incidentes entre aficiones. Además, el Ayuntamiento ha ordenado la retirada de todos los contenedores de basura de las calles próximas al campo durante la jornada, una medida ya aplicada en otros eventos de riesgo para prevenir su uso como objetos arrojadizos.
Los colegios de la zona mantienen el horario. El Colegio Pureza de María ha hablado con Protección Civil y les han asegurado que al salir a las cinco menos cuarto no hay ningún riesgo. El que ha decidido suspender las actividades es el polideportivo Pureza de María, pegado al centro y que en una nota anuncia a sus cursillistas y abonados, que por precaución, no habrá cursos desde las 15h.
Los hosteleros mantienen su horario, no van a cerrar en principio según nos cuenta el responsable del sector en Bizkaia, Héctor Sánchez. Lo que han pensado es trabajar normal y si ocurre algo, decidirán en el momento.
Antecedente en la ciudad
La llegada de aficionados franceses trae a la memoria los incidentes ocurridos en 2011, cuando ultras del PSG protagonizaron altercados en la zona de Doctor Areilza antes de un encuentro europeo contra el Athletic. Aquella noche dejó varios heridos y daños en establecimientos hosteleros. Ocho implicados fueron posteriormente condenados por desórdenes públicos, lesiones, daños y atentado contra la autoridad. Aunque las penas de prisión quedaron en suspenso, asumieron indemnizaciones, incluida una de 164.000 euros para un joven que sufrió un traumatismo craneoencefálico grave y fractura de mandíbula.
Jornada de control
Con la experiencia de aquel episodio y la previsión de desplazamiento de seguidores radicales, las autoridades pretenden garantizar un entorno seguro tanto para el partido como para la actividad cotidiana del barrio. El dispositivo permanecerá activo desde la mañana del miércoles y se mantendrá hasta la dispersión de las aficiones tras el encuentro en San Mamés.
