«Ya nos han fastidiado el día», lo ha contado Alazne en El Madrugador. Ella y su equipo llevan años asumiendo la gestión del restaurante Balgerri, en Zamudio. Hoy lunes, cuando han ido a trabajar, se han encontrado con la persiana rota en uno de los costados, lo que les ha dificultado abrirla. En una de las ventanas, los cristales rotos, al parecer por una o varias pedradas, les han confirmado lo que se temían, un intento de robo.

No es la primera vez que ocurre. «Hace cinco años, por estas fechas, también pasó lo mismo. Nos han dejado cinco años en paz, pero vuelta a lo mismo». La persiana del Balgerri es de las reforzadas y los ladrones no han logrado doblegarla. «Tiene pinta de alunizaje, han chocado con el coche en esta esquina».
El seguro
Alazne ha conseguido levantar la persiana dañada para iniciar el día con aparente normalidad. El Balgerri, situado en el polígono Torrelarragoiti, es un local de desayunos y comidas caseras, con un equipo que trabaja con ilusión por hacer más saludable la vida de sus clientes. Este no ha sido un día de suerte para ellos, aunque no del todo, porque, como señala Alazne, «por lo menos no han podido entrar y hacer más daños».
Nos lo cuenta desde la barra, sin parar de trabajar. En un rato, explica, tendrá que subir a la oficina y empezar con el papeleo. «Hay que dar parte al seguro, que no sé si cubrirá todo. Habrá que cambiar la persiana y revisar las cámaras de seguridad que tenemos». En esas imágenes es probable que Alazne pueda resolver las dudas sobre cómo se ha producido el intento de robo en su negocio.