Euskadi ha recuperado la normalidad prepandémica en materia de movilidad en Semana Santa, si bien hay que lamentar el fallecimiento de dos personas en la red viaria vasca, aunque por causas ajenas a los desplazamientos vacacionales. Así, el jueves 14 de abril, un motorista perdió la vida en Bilbao, en un accidente sin más vehículos implicados. Por otro lado, el viernes 15 de abril, un peatón en silla de ruedas fue atropellado por un turismo en la localidad guipuzkoana de Ibarra.
En cuanto al volumen de tráfico en Euskadi, se han superado ligeramente las previsiones, al registrarse una media de 515.000 desplazamientos de entrada y otros tantos de salida. Esto supone un 1,2 % más que antes de la pandemia. A pesar de la recuperación de la movilidad, la accidentalidad ha descendido un 37 % con respecto a 2019. En concreto se han producido 55 accidentes.
