
El Alcalde Juan Mari Aburto ha comparecido en el Ayuntamiento esta mañana para hacer un primer balance de la Final de la Europa League, día en el que se registraron 739 llamadas por incidentes, 47 de ellas vinculadas con el evento.
Además se registraron 7 detenciones, 2 intervenciones de los bomberos para apagar el fuego de contenedores, una agresión a un aficionado del Manchester United y una actuación policial por reventa de entradas. A pesar de ello, Juan Mari Aburto califica la jornada de satisfactoria, y ha mostrado agradecimientos a la ciudadanía de Bilbao por su buen comportamiento y por haber soportado los problemas de movilidad y tráfico rodado, así como a las instituciones participantes en el evento y a las fuerzas de seguridad. Aún así, el Alcalde ha condenado alguno de los incidentes que sucedieron durante la previa, como el destrozo de semáforos, aunque pide a la ciudadanía que no se centre en esas «anécdotas», sino en lo positivo del evento.
Respecto a las quejas de los hosteleros de la zona de San Mamés, Juan Mari Aburto ha mencionado que fueron informados de la situación desde un principio, y que los aficionados decidieron moverse por otras zonas, algo que desde el Ayuntamiento no podían controlar. «A la zona sólo podían acudir los aficionados con entrada, que eran unos 50.000, y los residentes. El problema es que decidieron moverse por otras zonas, algo que yo no puedo controlar».