
El buey desaparecido en Carranza hace dos semanas ha sido localizado muerto este viernes en una ladera cubierta de zarzas, a apenas medio kilómetro de su lugar habitual de estabulación. Así lo ha confirmado Txema Llamosas, su dueño. El hallazgo fue posible gracias al vídeo de un vecino difundido en redes sociales, en el que se mostraba el cuerpo semioculto del animal entre la vegetación.
El ejemplar, de raza Asturiana y 1.500 kilos de peso, pertenecía a una explotación ganadera ubicada en el barrio de Concha de Carranza. Fue encontrado en una zona conocida como La Siebe, donde ya se habían realizado varias batidas sin resultados. Llama la atención que el cuerpo se encontraba intacto, sin signos de haber sido devorado por carroñeros, a pesar de la abundancia de buitres y córvidos en la comarca.
La vegetación cerrada y la ausencia de rastros visibles dificultaron las labores de localización, a pesar de que el área había sido inspeccionada en repetidas ocasiones. El caso ha generado sorpresa entre los vecinos y el propio ganadero, dado lo inaccesible y discreta que resultó la ubicación final del animal.