Las familias del colegio Osotu Lanbarri han cumplido hoy 33 días de huelga de hambre y acampada en la calle frente a la sede del Gobierno Vasco en Bilbao. A las 18:00 horas se han concentrado en Gran Vía 85 en silencio, mientras los más pequeños formaban una fila con sus mochilas frente al edificio oficial, a la espera de saber si el centro abrirá sus puertas la próxima semana.
Modelo pedagógico innovador
En un comunicado leído durante la protesta, el AMPA de Osotu ha denunciado que el Departamento de Educación mantiene un mes de silencio administrativo, sin ofrecer una sola respuesta oficial. Las familias recuerdan que ya han reunido más de 4.000 firmas de apoyo ciudadano y que defienden un modelo pedagógico innovador basado en pedagogías activas, aprendizaje por proyectos, educación emocional e inclusión real.
El comunicado subraya que 203 alumnos y alumnas afrontan el inicio del curso sin certezas sobre su futuro, mientras que el equipo docente sigue en la incertidumbre laboral. “No pedimos favores ni privilegios, pedimos una respuesta definitiva sobre la continuidad de Osotu”, reivindican las familias.
La reunión convocada mañana, 2 de septiembre, con el Departamento de Educación se presenta como un momento decisivo. El AMPA exige una solución de estabilidad permanente, transparencia en el proceso y respeto a las familias como interlocutores válidos. “Nuestros hijos e hijas merecen certeza y estabilidad. Es hora de pasar de las palabras a los hechos”, han concluido.
