EUDEL, la Asociación de Municipios Vascos, ha mostrado su apoyo al nuevo impuesto local sobre estancias turísticas, una tasa que deberán pagar las personas que se alojen en hoteles, apartamentos u otros alojamientos turísticos de Euskadi.
Este impuesto tiene un objetivo claro: que el turismo deje un beneficio directo en los pueblos y ciudades que lo reciben. El dinero recaudado irá directamente a las arcas municipales y podrá utilizarse para mejorar servicios públicos como la limpieza, el mantenimiento urbano o la seguridad, especialmente en aquellas zonas donde la afluencia de visitantes genera más gasto.
Respetar la autonomía local
Desde EUDEL destacan que este nuevo impuesto es una medida positiva porque respeta la autonomía local. Es decir, cada ayuntamiento podrá decidir cómo aplicarlo, adaptándolo a su realidad y necesidades. También valoran que su implantación se haga de forma coordinada en los tres territorios —Álava, Bizkaia y Gipuzkoa— para evitar desigualdades entre municipios.
Equilibrio
Además, proponen que el impuesto sea progresivo, teniendo en cuenta el tipo de alojamiento y el poder adquisitivo de las personas que se hospedan. De esta forma, la medida busca un equilibrio entre impulsar un turismo de calidad y garantizar que este contribuya de forma justa al sostenimiento de los servicios que también utilizan los visitantes.
La presidenta de EUDEL, Esther Apraiz, ha recordado que era fundamental que este impuesto tuviera carácter local, ya que así el retorno económico de la actividad turística se podrá invertir directamente en los pueblos y ciudades, mejorando tanto la vida de las vecinas y vecinos como la experiencia de quienes nos visitan.
