En el número 8 de la calle Estraunza, en pleno corazón de Bilbao, la Navidad ha llegado antes de tiempo. Adolfo de Andrés, propietario del restaurante Gure Kabi Jatetxea, no necesita calendario de Adviento: su agenda de reservas ya marca el ritmo de las fiestas. “Desde este sábado 7 de noviembre hasta Navidad no tenemos sitio para comer los viernes y sábados”, asegura entre risas y orgullo. Y no exagera. Con casi 1.300 reservas confirmadas hasta el 20 de diciembre, el comedor está completamente lleno para las comidas de empresa y de cuadrillas que inauguran el ambiente festivo. “Tenemos incluso grupos que nos llaman con un año de antelación. Reservan en diciembre… ¡para el siguiente diciembre!”, explica.
1300 reservas
El restaurante, con capacidad para 90 comensales, suma ya casi 1.300 reservas hasta el fin de semana del 20 de diciembre. “Tenemos grupos que repiten año tras año, y algunos incluso reservan con doce meses de antelación. En diciembre del año pasado ya teníamos apuntadas varias fechas para este”, recuerda Adolfo. El secreto de su éxito, dice, está en no desviarse de lo que la gente espera de un restaurante bilbaíno en estas fechas: buena comida tradicional y un ambiente cercano. En su carta especial de Navidad ofrece cuatro menús diferentes, con precios que van desde 51 hasta 67 euros, pasando por opciones intermedias de 55 y 62 euros.
El auge de las comidas de empresa y de amigos se nota especialmente en el centro de la ciudad, donde la buena comunicación por transporte público se ha convertido en un factor clave. “Bilbao funciona bien porque la gente no quiere coger el coche. El metro se refuerza en Navidad y eso anima a salir más”, destaca el hostelero. De hecho, Metro Bilbao ha anunciado servicio nocturno reforzado los viernes 12 y 19 de diciembre, así como horarios adaptados en fechas señaladas como el 24 y 25 de diciembre y el 1 de enero, lo que facilita que grupos y empresas opten por celebrar sus encuentros en el corazón de la villa.
