Semana fantástica para el Surne Bilbao Basket. Tras arrasar al Peristeri en Grecia, logró su tercer triunfo en Liga Endesa doblegando al Casademont Zaragoza por 106 a 75. El acierto de un superlativo Darrun Hilliard, en su primera gran tarde en la villa, escoltado por un enchufado Justin Jaworski fue primordial para lograr este meritorio triunfo, cimentado también en la solidez defensiva.
Esto último se notó desde el salto inicial, especialmente con un Hlinason imperial, y con un acierto exterior superior al que nos tienen acostumbrados, los hombres de Jaume Ponsarnau comenzaron a abrir hueco en el marcador (12-7), aunque unos cuantos errores forzados por la elevada presión que impusieron permitieron a los maños recortar diferencias. Con el marcador apretado, aunque siempre con el cuadro bilbaíno por delante, la grada de Miribilla comenzó a protestar el criterio desigual con el que se señalaban las faltas. Y es que los jugadores del Zaragoza podían mostrarse algo más intensos, mientras que cualquier mínimo contacto de los MIB parecía señalarse como falta.
Imponiéndose en el físico, el Casademont Zaragoza logró su primera ventaja a falta de un minuto para la conclusión del primer cuarto con un triple de Bell-Haynes (19-21), respondido inmediatamente por un Justin Jaworski que continuaba en estado de gracia. Una canasta de Amar Sylla y un triple de Hilliard, el segundo de la tarde, aumentaron la renta a los cuatro puntos (27-23) al concluir el primer cuarto.
El criterio arbitral con las faltas seguía desesperando a los presentes, pero un Darrun Hilliard en estado de gracia con cinco puntos consecutivos sostuvo al Bilbao Basket en los primeros compases del segundo acto (32-25). La ovación de la grada después de que Jesús Ramírez solicitase tiempo muerto reconoció la buena labor del de Pensilvania.
Aunque lo que levantó a la grada de Miribilla fue un tres más uno de Justin Jaworski tras un tiro lejano. Y eso que falló el tiro libre, pero la ventaja local regresó a los dobles dígitos (38-27). Su cuarto triple la aumentó a dieciséis puntos (43-27) a falta de cinco minutos para el descanso. El Bilbao Basket se gustaba. Prueba de ello, un mate que Bagayoko intentó sobre Bojan Dubjlevic en las postrimerías de la primera parte, que concluyó con 50-34 en el marcador.

El Bilbao Basket se supera en el tercer cuarto
Pasar por vestuarios no pareció enfriar la muñeca de Darrun Hilliard, que anotó su quinto triple en cinco intentos. Frey, Bagayoko y Pantzar le escudaron, aumentando la renta hasta los 22 puntos (60-38). La habitual pájara de los MIB en el tercer cuarto esta vez no hizo acto de presencia. Merece la pena destacar el protagonismo de Melwin Pantzar en los minutos que estuvo en cancha, siendo el líder total y absoluto del equipo, rompiendo en dos la defensa del Casademont Zaragoza, tanto para anotar como para asistir. Así, la diferencia se fue a los 32 puntos (72-40) después de un triple a la remanguillé de Luke Petrasek. Conclusión de que a los de Jaume Ponsarnau les salía todo. Con 33 puntos de diferencia (78-45) se llegó al último cuarto.
El acto final no tuvo mucha más historia. Aleix Font disputó los minutos finales y continuó en la línea de sus compañeros. El Casademont Zaragoza no pareció esforzarse en exceso y los MIB anotaban con facilidad en la pintura. Hilliard prosiguió con su recital: anotó su sexto triple y llegó a los 20 puntos (90-55).
Sin nada en juego, el cuadro maño pasó a jugar con cierta tranquilidad y a recortar distancias de cara a un posible average. El marcador lucía un 96-70 a falta de tres minutos para la conclusión del partido. La barrera de los 100 puntos se superó gracias a cinco puntos de Jaworski y tres de Aleix Font, para poner el 106-75 definitivo en el marcador.
