La directora de Emakunde, Miren Elgarresta, ha presentado la Guía de Ciberviolencias ‘Ponle nombre’, un recurso pensado para ayudar a identificar las violencias machistas en el entorno digital que a menudo pasan desapercibidas. La publicación busca reforzar la educación digital y dotar especialmente a la juventud de herramientas para reconocer estas conductas y saber cómo actuar ante ellas.
En la elaboración de la guía ha participado la profesora de la Universidad de Deusto, Estíbaliz Linares, junto a Zaloa Lafuente e Iratxe Rodríguez, responsables de un documento que pone el foco en la prevención y la sensibilización frente a las agresiones que se producen en internet.
La violencia digital no es un fenómeno aislado
Durante la presentación, Elgarresta ha advertido de que la ciberviolencia no se limita al ámbito virtual, sino que forma parte de una violencia estructural contra las mujeres que se mantiene también en la era de la conectividad. En un contexto marcado por el auge de la manosfera y los mensajes antifeministas, la directora de Emakunde ha subrayado la necesidad de ofrecer a las personas jóvenes herramientas claras para detectar la violencia y responder de forma adecuada.
La guía explica que, aunque las causas de la violencia son las mismas, el entorno digital añade factores que agravan su impacto, como la inmediatez, el anonimato y la rápida difusión de los contenidos. Según Elgarresta, algunas situaciones comienzan con interacciones en redes sociales —especialmente cuando hay menores implicados— y pueden derivar en episodios de violencia sexual fuera de la red.
Por su parte, Estíbaliz Linares ha detallado las principales formas de ciberviolencia machista recogidas en la guía, entre ellas el ciberacoso sexista, el ciberacoso sexual, el gaslighting, el grooming, el cibercontrol y prácticas como el body shaming, la gordofobia o la presión estética.
El documento incluye además consejos prácticos y pautas de actuación tanto para las víctimas como para su entorno, y ofrece recomendaciones dirigidas al público masculino para contribuir a frenar la ciberviolencia mediante un uso crítico y responsable de las redes sociales. La guía se distribuirá en centros educativos y espacios juveniles de Euskadi y podrá descargarse online, con el objetivo de llegar al mayor número posible de jóvenes.
