David Salinas Armendariz: «El Athletic tiene que moverse y llegar a un acuerdo con la grada de animación»

En su intervención en el programa Bilbosport de Radio Nervión, David Salinas Armendariz, abogado y reconocido tertuliano, ha señalado que la situación con la grada de animación del equipo no tiene una solución sencilla, pero ha insistido en que el club debe moverse para llegar a un acuerdo con los diferentes grupos implicados.

Salinas destacó que, aunque la actitud de Íñigo Cabacas Herri Harmaila, podría necesitar ajustes, el Athletic también debe ser responsable. Según el abogado, la grada de animación es crucial para el ambiente del estadio y para el equipo, por lo que sería una «pena» que se perdiera su potencial. «El Athletic tiene que moverse, y aunque tiene razón en muchas de las decisiones tomadas por la directiva, está obligado a encontrar un acuerdo», afirmó Salinas.

Falta de discrección

El colaborador también criticó la falta de discreción por parte del Athletic a la hora de manejar las negociaciones. Señaló que, antes de reunirse con los grupos afectados, el club ya había sacado a la luz los términos de la negociación, lo cual consideró un «error estratégico». A pesar de ello, Salinas enfatizó que el club debe mantener su autoridad, pero también ser consciente de la necesidad de dialogar con todos los sectores involucrados, incluyendo la grada de animación.

Sobre las sanciones impuestas por la Liga, la Federación Española de Fútbol y el Gobierno Vasco, Salinas hizo una distinción entre tres tipos de comportamientos sancionables: las infracciones a las normas del fútbol, las normas públicas del Gobierno Vasco, y las sanciones internas del Athletic.

En este sentido, el colaborador subrayó que el Athletic no debe limitarse a acatar las sanciones de la Liga. Debe tener sus propios criterios en cuanto a la libertad de expresión en el estadio. Siempre y cuando no se sobrepasen los límites de la discriminación, la violencia o el racismo.

Libertad de expresión

Salinas defendió la importancia de preservar la libertad de expresión dentro de los estadios. Señaló que no todas las pancartas o proclamas deben ser consideradas sancionables. Puso como ejemplo el caso de una pancarta con el nombre de Rubiales tachado, que había sido sancionada. Cuestionó la necesidad de restringir este tipo de manifestaciones dentro del marco deportivo. «La libertad de expresión debe prevalecer», afirmó, destacando que no todo en los estadios debe estar limitado a la animación del equipo. Los aficionados tienen derecho a expresar opiniones políticas o sociales dentro de los límites de la ley.

Además, David Salinas Armendariz abordó la cuestión de las sanciones internas del Athletic. Destacando que, en muchos casos, las multas y sanciones que se imponen afectan a los socios y al club en general. «Las sanciones deben ser proporcionales y no ser asumidas por todo el colectivo cuando solo una parte está incumpliendo las normas», indicó.

Sobre las sanciones del Gobierno Vasco, Salinas también propuso que el Athletic podría intermediar de manera más eficaz para evitar la confrontación. Sugirió que las identificaciones y sanciones se realicen fuera del recinto deportivo para evitar que se conviertan en un motivo de enfrentamiento dentro del estadio.

Finalmente, Salinas expresó su pesimismo sobre la resolución de la situación. Aunque mostró su esperanza en que, a través del diálogo y la mediación del Athletic, se pueda llegar a un acuerdo. Afirmó que la animación es un «plus» vital para el equipo, y que sería lamentable que la falta de acuerdo afectara al ambiente del estadio.